Hasta 7.500 € de multa y retirada del carné para quienes conduzcan este tipo de vehículo sin el permiso correspondiente.

Incluso con un vehículo pequeño, la ley no perdona.

El punto en común entre coche, scooter y patinete eléctrico se resume en una palabra: seguro. Sin este documento, la carretera se convierte rápidamente en un campo minado.

Qué documento falta y por qué lo cambia todo

La norma no admite ambigüedades: todo vehículo a motor debe contar con un seguro de responsabilidad civil. Este documento toma la forma de un certificado y una tarjeta (la pegatina), que demuestran la cobertura en caso de daños a terceros. Sin ellos, el conductor asume en solitario las consecuencias económicas de un accidente.

Desde 2019, los patinetes eléctricos y, en general, los vehículos de movilidad personal motorizados se equiparan a vehículos terrestres a motor. Por tanto, deben asegurarse igual que un coche o una motocicleta.

Sin un certificado de seguro válido, cualquier conductor se expone a una multa de hasta 7.500 € y a la retirada del carné.

Qué prevé la ley y las sanciones cuantificadas

La ley ha establecido una multa penal estándar por carecer de seguro. El baremo se aplica desde el primer control sin documento en regla.

• Multa estándar: 500 €.
• Importe reducido: 400 € si se paga en 15 días.
• Importe incrementado: 1.000 € pasados 45 días.
• En caso de reincidencia: hasta 7.500 €, con suspensión o retirada del carné de hasta tres años.
• Medidas posibles: inmovilización y confiscación del vehículo, curso obligatorio, trabajos en beneficio de la comunidad.

No se aplica la retirada de puntos, pero las medidas complementarias pesan mucho. Una retirada del carné dificulta la vida diaria, el empleo y el acceso a seguros posteriores, que suelen ser más caros.

Patinetes y otros vehículos: mismas reglas desde 2019

La regulación se ha endurecido para integrar los nuevos usos urbanos. Los patinetes eléctricos siguen limitados a 25 km/h, están prohibidos en las aceras y reservados a usuarios de al menos 14 años. El conductor debe ser identificable y respetar el código de circulación. El seguro es obligatorio, aunque el vehículo se use poco o sólo para trayectos cortos.

La responsabilidad civil cubre los daños a un peatón, a un ciclista o a un vehículo. No cubre tus propias lesiones. Un contrato adecuado también protege tu presupuesto legal en caso de conflicto.

Cuánto cuesta el seguro y qué cubre realmente

El coste de entrada es bajo para un patinete eléctrico: entre 5 y 7 € al mes en la mayoría de los casos. El contrato básico incluye la responsabilidad civil de circulación. Hay opciones que refuerzan la protección: defensa jurídica, cobertura del conductor, robo, rotura, asistencia.

Unos pocos euros al mes pueden evitar una deuda potencialmente vitalicia tras un accidente grave con heridos.

Por qué aumentan los vehículos sin seguro

Entre 2017 y 2023, el número de vehículos en circulación sin seguro ha aumentado más de un 200 %. Los nuevos vehículos, de bajo coste, contribuyen a ello. Los controles automatizados y el registro de vehículos asegurados detectan mejor las infracciones, lo que revela la verdadera magnitud del fenómeno.

Este aumento repercute en las víctimas y en el conjunto de la sociedad. Las indemnizaciones adelantadas por el fondo de garantía acaban repercutiendo en todos los asegurados a través de cuotas específicas.

Víctimas y reclamaciones: quién paga en caso de accidente sin seguro

En caso de heridos graves, el fondo de garantía indemniza a la víctima y luego reclama al conductor no asegurado. La factura incluye atención sanitaria, pérdida de ingresos, daños y costes de adaptación del domicilio. Las cantidades superan rápidamente los cientos de miles de euros.

• Ejemplo: colisión con un peatón, incapacidad permanente, gastos de rehabilitación y asistencia en el hogar.
• Indemnización potencial: de 150.000 a 500.000 € según las secuelas y la edad de la víctima.
• Reclamación: embargo de salarios, cuentas, bienes, durante varios años.

No tener seguro puede llevar a tener que devolver el dinero durante años, con intereses y costes de gestión.

Cómo ponerse en regla en 15 minutos

Lo más rápido es contratar online y guardar el certificado en formato digital y en papel. La pegatina debe colocarse si el vehículo así lo requiere.

• Identificar el tipo exacto de vehículo: patinete eléctrico, segway, moto, coche.
• Preparar la documentación: identidad, justificante de domicilio, número de serie o VIN, historial si es necesario.
• Elegir el nivel de garantías: solo RC, incluir conductor, defensa jurídica, robo y daños.
• Comprobar exclusiones: velocidad modificada, uso profesional, préstamo, accesorios.
• Descargar el certificado y guardar el número de póliza en el móvil.

Buenas prácticas para evitar la tarjeta roja

• Asegurar el vehículo antes de cualquier salida, incluso para “probarlo” en la calle.
• Guardar una copia del certificado en el móvil y otra en casa.
• No confundir RC hogar con RC circulación: un patinete motorizado necesita un seguro específico.
• Informar al seguro si se presta el vehículo regularmente a un familiar o amigo.
• Actualizar la dirección y el e-mail para recibir avisos de renovación.

La responsabilidad civil de hogar no cubre un patinete eléctrico con motor. Es obligatorio un contrato específico.

Preguntas prácticas que se hacen los conductores

¿Y si alquilo un patinete compartido?

Los operadores suelen incluir la responsabilidad civil durante el alquiler. La franquicia puede ser alta y algunas situaciones están excluidas: circular dos personas, salir de las zonas permitidas, conducir bajo los efectos del alcohol. Un accidente fuera del contrato puede acabar siendo de tu cuenta.

¿Cómo comprobar que mi vehículo figura como asegurado?

El registro de vehículos asegurados permite una comprobación rápida por parte de los agentes. Para ti, lo ideal es revisar el certificado, comprobar la matrícula o número de serie que aparece, y mirar la fecha de vigencia. Ante la duda, una llamada al seguro aclara la situación en pocos minutos.

¿Qué coberturas merecen la pena para un patinete?

La cobertura al conductor protege tus propias lesiones, que normalmente quedan desatendidas por defecto. La defensa jurídica cubre honorarios de abogado y gastos periciales. El robo puede ser interesante en modelos caros, siempre que se acepte un antirrobo homologado y un aparcamiento seguro.

Lo esencial para circular sin preocupaciones

• Documento imprescindible: certificado de seguro de responsabilidad civil, incluso para un patinete eléctrico.
• Sanciones: de 400 a 1.000 € en la primera infracción, hasta 7.500 € y retirada del carné en caso de reincidencia.
• Riesgo económico: reclamación del fondo de garantía tras indemnizar a las víctimas.
• Bajo coste de cumplimiento: desde 5 a 7 € al mes para un patinete.

Antes de comprar un vehículo, simula el coste del seguro indicando la velocidad máxima, número de serie, lugar de estacionamiento y uso previsto. Un pequeño ajuste técnico, como una modificación no homologada, puede invalidar la cobertura y provocar la denegación de indemnización. Es mejor declarar el vehículo tal y como se usa a diario.

Un conductor responsable vigila también el mantenimiento: frenos, luces, neumáticos. Un defecto material agrava las consecuencias de un accidente y complica las reclamaciones. El seguro cubre la responsabilidad, no la negligencia reiterada. Un vehículo en buen estado, un seguro al día y una conducción respetuosa evitan problemas administrativos y facturas interminables.